La arquitectura como testigo fundamental de la historia siempre está allí: al crearse, levantarse, transformarse, renovarse, deteriorarse o desaparecer… Siempre contándonos una experiencia, siempre revelándonos una realidad…
La siguiente frase del historiador de la arquitectura Ramón Gutiérrez marcó mi visión del hecho arquitectónico y se convirtió en el objetivo de mi quehacer como profesional: Entender el hecho arquitectónico como el testimonio de los valores de la sociedad y la cultura durante un determinado tiempo histórico.